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Innovación + Talento = INprendedores e INtraEmprendizaje

El término “INprendedor” significa “emprendedor por cuenta ajena”, y en principio puede sonar a oxímoron (figura retórica de pensamiento que consiste en complementar una palabra con otra que tiene un significado contradictorio u opuesto) porque no suele ser nada común que dentro de las organizaciones (sobre todo las grandes) se reproduzca el dinamismo, la autonomía y, sobre todo, el entusiasmo con que los emprendedores asumen los retos de sus propias empresas.


El emprendizaje es un término que está en boca de todos en los últimos tiempos, pero ¿qué es realmente el emprendizaje? Según la Real Academia de la Lengua Española, el término emprender proviene del latín in, en, prendĕre, coger, y su significado es el siguiente: Acometer y comenzar una obra, un negocio, un empeño, especialmente si encierran dificultad o peligro.


La forma más habitual del emprendizaje es la creación de una nueva empresa (conocida como Startup Company). Sin embargo, en los últimos años el término se ha ido extendiendo hasta llegar a abarcar actividades emprendedoras en el ámbito social y político. A su vez, hay que mencionar que cuando la actividad emprendedora se da dentro de una compañía u organización, se denomina Intraemprendizaje.


Ideas-fuerza sobre qué condiciones deben darse en las empresas para que la actitud emprendedora sea compatible con el trabajo por cuenta ajena. Ingredientes para crear un sustrato de INprendimiento dentro de las organizaciones.


El libro digital INprendedores. Experiencias y reflexiones sobre el arte del intraemprendizaje dentro de las organizaciones. Se habla de los «INprendedores», aquellos que empujan dentro de las organizaciones para que se muevan las «patas de los elefantes».


¿Qué condiciones deben darse en las empresas para que la “actitud emprendedora” sea compatible con el “trabajo por cuenta ajena”?


Reconociendo el grado de dificultad del concepto, sí es posible crear un “sustrato de INprendimiento” dentro de las organizaciones si se mezclan ingredientes como: la confianza, la transparencia, un generoso reparto del poder, buenos sistemas de incentivos, una valiente gestión del talento, tolerancia al error y fomento de la experimentación dentro de un modelo integral que cuide la dimensión humana de la gestión.


Los nuevos modelos organizativos, y de la necesidad que tenemos de repensar arquitecturas de empresas que intenten emular el dinamismo y la autonomía.


En la gestión de las organizaciones, un cambio que tiene que ver con la forma en que se relacionan las personas y con su asunción de un papel más activo. Es la hora en que,….las personas sean el centro. No los procedimientos, no la calidad, no el producto, no los mercados, sino las personas; de fuera y de dentro de las organizaciones. Confianza en las personas. Resume las ideas de cuatro pares de conceptos en oposición, en el apartado Manifiesto INprendedor. Preferimos:

  • la acción frente a la planificación

  • la libertad frente a la organización

  • la confianza frente al control

  • la red frente a la jerarquía


¿Qué podemos hacer para que la innovación, la flexibilidad y la creatividad sean más operacionales?


PERFIL DEL INPRENDEDOR


El perfil puede variar según la personalidad, pero existen características comunes.


Son personas con un objetivo, con ganas de crear y de innovar. También es de mencionar que tienen mucha confianza en sí mismos y que por eso asumen muchos riesgos. Las características principales de estas personas son las siguientes:


1. La ilusión es una de las claves para ser emprendedor ya que es una motivación para realizar esas ideas o inquietudes que tenga la persona por lo menos en la primera fase del proyecto a realizar.


2. La confianza, nunca hay que perderla, no todo se consigue de un día para otro y en ese camino es importante tener esta confianza, para afrontar con ánimo las malas épocas.


3. El optimismo es importante ya que las cosas se pueden ver de un lado más positivo, todas las situaciones se pueden mirar de una manera mejor.


4. La capacidad de actuar y el querer aprender son dos actitudes que van unidas. Hay que conocer lo que uno hace, pero hay que tener ganas de aprender lo que no se sabe. El emprendedor es una persona inquieta y lo tiene que demostrar con acciones.


5. La paciencia será el mejor aliado de la persona emprendedora, el crear y hacer crecer es un tema que se consigue en plazos largos y con mucho esfuerzo.


Una valiente gestión del talento parece clave, porque “dime qué tipo de gente buscas, y te diré quién eres”. El impacto que tiene en las organizaciones la gestión de errores, y los mensajes que se emiten cada vez que se castiga o se aprende de un error desde el punto de vista de propiciar entornos INprendedores. Insistimos en el valor de la confianza y la transparencia: “Si quieres emprendedores dentro de tu organización, abre los datos y haz a tu gente co-responsable del proceso”.


Sobrevivir al cambio social: la figura del INprendedor


La situación de competencia global y el estrechamiento de los márgenes comerciales en la mayoría de los mercados, ha implicado una transformación de la gestión del talento, buscando la diversidad, la innovación y la diferencia. En este sentido, las compañías deben aprovechar el talento interno para darle salida en forma de nuevas empresas, desarrollo de negocios actuales, inversión en startups, etc. He aquí donde aparece el INprendedor, esa persona con un gran talento pero que queda en cierto anonimato dentro de su propia compañía.


Si las empresas desean sobrevivir al cambio social en el que nos encontramos deben empezar a tener en mayor consideración a los empleados con ideas novedosas, ya que son vitales para su supervivencia, según recoge el libro INprendedores.

El intraemprendedor, sabe que para atraer aire realmente fresco hacia la empresa tiene que buscarlo en esos parajes donde abundan emprendedores y personas con ganas de cambiar el mundo y en los que la espontaneidad, la improvisación, el pensar a medio plazo o el inconformismo, son valorados al mismo nivel que el conocimiento, la experiencia, el cortoplacismo o la fijación de unos objetivos concretos.


La crisis ha supuesto una sacudida tremenda para los sistemas económicos a nivel global, sin embargo, ha demostrado también que muchos negocios se mantenían gracias a la bonanza económica, algo que ya no es posible, la situación actual puede suponer un panorama fructífero para aquellos inprendedores que sepan aprovecharlo, puesto que las compañías que no funcionen desaparecerán, dejando menos competencia para aquellas que sean más eficientes e innovadoras. Debido a la crisis, los costes relacionados con el mantenimiento de una empresa han disminuido, y actualmente las compañías pueden disponer de una amplia oferta de personas con un alto nivel de preparación y talento. Factores que a la larga pueden suponer el crecimiento de nuevos modelos de negocio.


¿Potencias el Inprendimiento en tu organización?

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